Los procesos de selección de una nuevas tecnologías son habitualmente procesos largos y costosos, que requieren del involucramiento intensivo de recursos de la empresa y de los proveedores.
Con el engorroso y largo método de selección anterior, muchas veces sólo se lograba un compromiso comercial entre las partes y no se lograba que el cliente y el proveedor establecieran una relación de partners, elemento fundamental para el éxito posterior del proyecto.
Las nuevas condiciones de trabajo y la necesidad de contar en tiempo más corto con los servicios operando para los clientes, ha llevado a desarrollar metodologías ágiles y flexibles, que sin dejar de ser rigurosas y exigentes permite tener resultados en menor tiempo, lo que habilita la toma de decisiones de acuerdo al time to market del negocio.
Basado en la metodología propuesta por ClearStream Consulting
y la metodología para desarrollar procesos de RFP elaborada por Asesorías Enable, hemos arribado a un método convergente y estructurado, con la adecuada trazabilidad y con tareas semanales con los potenciales proveedores, que le permite al cliente identificar rápidamente una lista corta y luego una estimación realista de precios, de modo que le es posible al cliente hacer un caso de negocios y por el lado del proveedor contar con una dimensión real de su potencial oferta, sin que sea necesario completar un volumen de información administrativa innecesaria mientras no sea elegible.
Con este método, ya no es necesario hacer un proceso de RFI (Request for Information), luego un proceso RFP (Request for Proposal) rígido, que normalmente es muy trabajoso con muchas brechas de información, y que genera compromisos complejos por ambos lados, que a la larga complica el proyecto de implementación, aunque luego hayan POC ( Proof of Concept - Pruebas de Concepto), Boletas de Garantías, etc..